…es un equilibrio extraño entre la tranquilidad
perturbadora y la furia del que es maltratado por la vida. El pretexto para el
color que utilizo es encontrar la forma, de alli nacen estas manifestaciones
que suelen llamarse personajes. Simplemente es mi inconsciente tratando de
ponerse en contacto o expresar lo que para mi es el mundo real en el que
transitamos.
La materia me interesa de manera obsesiva. Sea pintura, dibujo,
música, mi motivación siempre parte de alguna idea biográfica. En ese sentido
tengo ciertos límites al momento de crear, parto de mi y lo que sucede a mi
alrededor. En mi obra existe todo un planteamiento de composición, un balance
de volúmenes, de espacios, una interrelación entre lo expresado y su contorno.
El color responde únicamente al
esfuerzo por lograr un ideal, una perfección anhelada. Cosas que sólo uno puede
entender y no puede explicar con palabras.
Todo lo que produzco es un proyecto y al mismo tiempo no lo es,
uno produce para evolucionar y explotar las habilidades pictoricas que pueda
poseer, y mi obra representa el momento actual. Un golpe visual a la violencia,
la cara oculta de la modernización, la alienación, el aislamiento, la
masificación y los sentimientos de un ser humano ante los tiempos modernos.
Utilizo el material y el soporte clásico, para materializar y retratar una
verdadera pintura y dibujo actual, una representación del hombre de hoy. Libre asociación de ideas...
Como un riff de guitarra, melódico y agresivo al mismo tiempo,
mi pintura posee una inquientante belleza y descarnada rabia, mi tema siempre
será la vida misma, y lo que yo vivo…
Pero tal véz, esto no le importe a nadie…
Renato Rosado Garcia
Lima, 2014
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